Cita bíblica:
Juan 1:14
"Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad."
Para meditar:
La gracia la podemos comprender como la suficiencia de Dios, nosotros en nuestra capacidad no podemos completar obra alguna. El Dios de gracia nos sostiene, nos perdona y nos imprime su propia identidad. Jesús, la presencia de Dios mismo, hecho carne, habitó entre nosotros como hombre, nacido de mujer, sujeto a sus padres y a la instrucción de ellos. Jesús, el mismo verbo, nos muestra mediante su gracia la gloria de Dios.
Así nosotros fuimos salvos por gracia, no de nosotros, es decir que no tuvimos ningún mérito por ello, sino que fue un regalo de Dios, para todo aquel que le reconoce y recibe como Salvador. Nosotros no podemos hacer lo que Cristo hizo, al entregarse por nuestros pecados. Pero si podemos agradecer lo que hizo por nosotros y caminar conforme a su voluntad.
No debemos conformarnos con la gracia de salvación, ya que la gracia no es solamente para la eternidad, sino que es tan grande que cubre la vida en esta tierra, mediante la influencia divina, que es a través del Espíritu Santo, con el cual somos capacitados para hacer toda buena obra.
La gracia de Dios en nosotros es la que actúa para ser transformados mediante su suficiencia, el mismo poder de aquel que resucitó a Jesús de entre los muertos opera en su gracia para que la gloria de Dios sea manifestada ahora a través de nosotros, y llenos de gracia hagamos las obras que nos ha llamado, sea testificar con poder, de su amor o ministrar su paz.
En este tiempo de ayuno, llénate de su gracia, sacia de Él tu boca, leyendo su palabra, meditando en ella, obedeciéndola, llenándote de su Espíritu Santo, orando en nuevas lenguas, para ser guiado por Él. Prepara tu corazón en humildad, no creyendo que hayas logrado algo por tu propia capacidad, pues recuerda que Dios resiste a los soberbios mas da gracia a los humildes.
2 Corintios 9:8
"Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra;"
Preguntas para reflexionar:
¿De dónde te rescató la gracia de Dios?
¿Cómo opera la gracia en ti en este tiempo?
¿Cómo podrías llenarte más de su gracia para completar la obra que Dios te dió?
Orar por:
Comprender la plenitud de su gracia
Que sea quitada cualquier cosa que esté estorbando su gracia
Por ser llenos de gracia para cumplir la obra que nos ha llamado.
Alabanza: "Gracia"