Rinde tu vida a Dios
Cita bíblica: Efesios 4:22-24
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
Para meditar:
Otro enfoque con el que podemos estudiar esta puerta es recordar que nuestro viejo hombre o vieja naturaleza esta corrompida, se inclina al mal, busca auto complacerse, etc., en definitiva no hay forma de agradar a Dios con nuestro lado humano, que si bien hay buenas intenciones en ello, eso sólo eso, buena intención, pero cuando vamos al siguiente nivel donde en lugar de buscar nuestra satisfacción, decidimos agradar a Dios, es entonces donde surge la naturaleza espiritual, y en esa condición podemos bendecir, edificar, amar y animar a otros, etc., y mucho más aún permitir que el plan de Dios se cumpla en tu vida.
Cada día de nuestras vidas nos encontraremos en esa batalla, entre lo humano y lo divino, entre lo que nos satisface y lo que agrada a Dios, y aunque conocemos la elección correcta, cuando nuestras convicciones son confrontadas frente a nuestros amigos, familia, compañeros de trabajo o escuela, enfermedades, necesidades, etc., podríamos sentirnos tentados a tomar decisiones que no causen incomodidad frente a otros o que nos saquen del problema rápidamente, dejando de lado la voluntad de Dios, descalificándonos como discípulos aptos (Lc. 14:33).
Por otro lado, es un error grave fijar nuestro estándar en la vida de otros cristianos al compararnos con ellos, pensando que, por qué ellos lo hacen, está permitido para nosotros, pero no es así como debemos conducirnos, la Palabra de Dios claramente establece que Jesús es nuestro modelo (1 Pe. 1:14-16).
No es necesario que ninguno de nosotros toque fondo para hacer un compromiso con Dios, “Hoy es el día para despojarnos de nuestros viejos hábitos, y modos de vida que están fuera de la voluntad de Dios”, se requiere una voluntad firme para no desistir, porque ser cristiano no es hacer lo correcto cuando otros cristianos nos ven, sino cuando estamos solos y Dios es el único que mira nuestro actuar. Vivamos una vida de tal forma que cuando estemos frente a nuestro Dios sus palabras sean: bien, buen siervo y fiel, entra en el gozo de tu Señor.
Para reflexionar:
• ¿Vivo una vida con hábitos ocultos?, ¿Cuáles son?
• ¿Qué cosas sé que están mal en mí y aunque he orado no he podido dejarlas?
• ¿Estoy dispuesto a hacer hoy un compromiso con Dios?
Orar por:
• Por que pueda acercarme a pedir ayuda en aquellos hábitos en los que no he podido tener victoria
• No dejar para después el compromiso de una vida rendida a Dios.
Alabanza: Todo rindo
https://www.youtube.com/watch?v=I4TGIrIR9p