Cita bíblica:
Juan 8:32
“y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”
Para meditar:
Quizá esta escritura es una de las más citadas en las predicaciones, en la oración, incluso cuando intercedemos por alguien. Sin embargo, necesitamos descubrir el poder de la verdad, nos hace libres. Recuerda como Jesús ahuyentó a Satanás durante la tentación, con la verdad.
Puede ocurrir que, sin darnos cuenta, hemos caído en algún yugo de esclavitud de hecho. En el contexto de esta escritura Jesús está hablando con los judíos que habían creído y ellos argumentaron que jamás habían sido esclavos de nadie.
Meditemos en algunos yugos: Marcos 4:19 "pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa".
La verdad que nos hace libres es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa (Mateo 13:22).
La verdad que nos liberta es que, si buscas primeramente el reino de Dios y su justicia, todas las cosas por las que te afanas (en cuanto al sustento físico) serán añadidas (Mateo 6:33). Esta verdad te apoyará en finanzas sanas.
El yugo de infidelidad a Dios. Cuando creemos las artimañas del engaño, podemos ser desviados en nuestra manera de vivir:
2 Corintios 11:3 "Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo".
La verdad que nos liberta ocurre mediante el ejercicio de nuestros sentidos espirituales, discerniendo el bien y el mal (Hebreos 5:14), tomando el alimento sólido, cuando profundizamos en el estudio y entendimiento de la palabra, y buscamos las cosas espirituales. Esta verdad nos librará de tomar malas decisiones.
El yugo de la problemática de las relaciones. Cuando damos rienda suelta a nuestros pensamientos, conducidos por las maquinaciones de nuestro corazón podemos llegar a ser causa de división a causa de que no hallamos la paz con las personas.
1 Pedro 3:10 "Porque: El que quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño".
La verdad que nos liberta, lo escribe un poco más adelante el apóstol Pedro “quién quiere ver días buenos… apártese del mal, y haga el bien; Busque la paz, y sígala. Porque los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos a sus oraciones” (1 Pedro 3:11-12). Esta verdad te llevará a tener relaciones con auténtica paz.
Preguntas para reflexionar:
¿Qué aspectos de tu vida han caído en algún yugo de esclavitud?
¿Cuál es la verdad, en la palabra de Dios, que revela el engaño en que habías caído?
¿Cómo podrías ser transformado en tu mente y corazón al ser libre por la verdad?
Orar por:
Confesión de pecados acerca de cualquier trampa de engaño en que hayas caído.
Que sea revelada la verdad que liberta cualquier engaño del enemigo.
Por plenitud por vivir en verdad de Dios para que el poder de Dios se manifieste en libertad de la esclavitud.
"Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres” Juan 8:36
Alabanza: "Libre"
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